La que hace de árbol se emociona cada vez máss con la canción. Cuendo toda la clase está en su sitio menos ella, la MAESTRA la toca para llamar su atención. Tendrá que insistir dos o tres veces.
MAESTRA Perdona… disculpa… cariño…
La que hace de árbol finalmente abre los ojos, deja de bailar, mira a la MAESTRA.
MAESTRA Siéntate, por favor.
La que hace de árbol ya no hace de árbol, ya no canta, ya no baila. Solo baja la cabeza y toma asiento.
– Rosina traga saliva.
– No sabe por donde empezar.
– No sabe qué decir.
– Seguramente está pensando alguna mentira.
– De esas que les cuentan a los crios de infantil, para que no tengan miedo.
– Com si no fuéramos mayores para entender.
– Com si no fuéramos mayores para ser valientes.
– De todas formas, nosotros tenemos un plan.
– I diga lo que diga Rosina, lo llevaremos a cabo.
MAESTRA Necesito que me escuchéis con atención.
– Pero Rosina no dice ninguna mentira.
MAESTRA Vosotros ya sois mayores.
– Rosina se sienta entre nosotros.
MAESTRA Y sabéis que la vida no solo es alegría.
– En el suelo, como nosotros.
MAESTRA También hay sufrimiento.
– Habla de forma diferente.
MAESTRA En cualquier caso, ni la alegría ni el sufrimiento son para siempre.
– Nunca la habíamos oído hablar así.
– Hablaba de estar tristes.
– Nos pregunto si alguien había perdido un animal de compañía.
– ¡Yo! Mi perro: Ares.
– ¡Yo! Mi gata: Neula.
Nos preguntó si a alguien le faltaba un abuelo o abuela.
Algunas levantan el brazo.
– Todo el mundo tenía la misma pregunta en la cabeza.
– ¿Dónde está Leti?
– Pero ahora ya no queríamos hacerla en voz alta.
– ¿Dónde está Leti?
– Ya no queríamos saber la respuesta.
– ¿Dónde está Leti?
– Y sin embargo, en nuestro interior, ya empezábamos a saberla.
COMPAÑÍANo estrenadaLABORTextoAÑO2022